Ciclo de conferencias
La tentación del pensamiento único
a cargo del Dr. José Ricardo Pierpauli
La
homogenización del pensamiento no es
tan solo un recurso estratégico de los regímenes totalitarios, sino la natural conclusión
hacia la que conduce la lógica interna del liberalismo
político. Un autor como Baruj Espinosa supo conjugar la necesidad de la desalienación
del hombre respecto del Dios Revelado, según la tradición pre-moderna, con su
nueva incardinación en el interior de un
sistema teológico político, en cuya cúspide ya no está el Dios Revelado,
sino el gobernante político, vale decir, el dios
mortal de quien dependen, no tan solo los límites nuevos de la libertad de
pensamiento, sino aun las formas del culto religioso. Ningún autor como Espinosa
nos muestra mejor el servicio que a los regímenes totalitarios le ofrece la estandarización
del pensamiento único.
La
homogenización del pensamiento es, a los fines de los regímenes totalitarios,
una necesidad y al mismo tiempo, la garantía de la nueva paz política que
proponen. Mas dado que sus mentores siempre han reconocido, al menos
tácitamente, la natural religiosidad de la persona humana, la formulación de esa
nueva religión, esta vez,
rigurosamente política, constituye uno de sus
pilares fundamentales.
Así
pues, la muerte de Dios no es una
novedad descubierta por F. Nietzche, sino que se trata de un recurso al que han
apelado autores de la más diversa orientación desde Kant hasta Marx, sin
perjuicio de sus herederos contemporáneos. La muerte de Dios, hacia la que nos
conducen las formas más variadas del deicidio
contemporáneo se encuentra presente, antes que en los postulados del pensamiento único, en los presupuestos ideológicos
que los actuales gobiernos difunden a través de los sistemas pedagógicos que están
en la base de sus respectivas ordenaciones políticas y jurídicas.
El
conjunto de las afirmaciones que se intentara demostrar pretende poner de
manifiesto que la estandarización del pensamiento resulta ciertamente de la
coactiva imposición de los regímenes políticos, pero también puede ser incoada
en la conciencia individual, toda vez que los hombres pierden de su horizonte a Jesucristo como
marco de referencia de la auténtica virtud política.
Jueves 29 de noviembre 19:30 hs
Colegio de Abogados de la Cuidad de Buenos Aires.
Montevideo 640, Buenos Aires - Entrada gratuita